Después de 8h de avión y 11h de espera en el aeropuerto, por fin la esperada llegada a Erbil. Una ciudad rodeada de campos de refugiados. Nuestro primer contacto con la realidad fue la reunión de seguridad con ACNUR y al tajo. El día se plantea interesante, 3 campos de refugiados nos esperan repletos de niños con ansias por sonreír y evadirse de una realidad poco esperanzadora. Por un ratito en directo y por mucho más tiempo en sus retinas, las sonrisas les invadirán.
Más que calurosa es nuestra bienvenida, el corazón se nos llena de enormes ojos negros y amplias sonrisas. La vara del profesor no les quita ni las ganas de sonreír ni la ilusión de ver lo inverosímil que les parece 4 adultos vestidos de forma extraña con narices rojas y haciendo juegos para divertirlos. Un zumo y un pastelito crean conflictos que hacen llegar a las manos, pero seguimos repartiendo sonrisas con el corazón blandito y la moral alta sabiendo que para nosotros es el trabajo más bonito y reconfortante del mundo.
Ni en Kurdo ni en Árabe existe la palabra PAYASO, para su definición les mostramos muy buenos ejemplos.
Taller para adultos:
No hay comentarios:
Publicar un comentario